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Su época dorada llegó hasta principios de los años 1930, cuando el profesionalismo entró en el mundo del fútbol y los clubes de las capitales de provincia, como la Real Sociedad en Guipúzcoa, camisetas fútbol predominaron sobre el resto. En esa primera liga el Real Unión termina en 9.º puesto, solo por delante del Racing de Santander, lo que le permitió aún conservar la categoría, siendo prácticamente la misma plantilla que se había proclamado campeona de España solo dos años antes. Como ganadora de 3 títulos de Copa, el Real Unión fue incluida por méritos propios en la Primera División de España 1928/29 de 10 equipos que comenzó en febrero de 1929. Las primeras temporadas de Liga marcan el rápido declive del que muchos habían considerado el mejor club amateur del fútbol español. Otros jugadores internacionales con España que tuvo el Real Unión durante las décadas de 1920 y 1930 fueron Francisco Gamborena, José Echeveste, Juan Errazquin, Sagarzazu, Luis Regueiro, Pedro Regueiro y Julio Antonio Elícegui. Francisco antes de ganar la lotería, era el chofer de Regina (Beth Goulart), villana principal de la historia, que a su vez es madre de Patricia.
Eguiazábal y Arabolaza formaron parte del primer once de la historia de la selección, y Patricio fue además quien anotó el primer gol de su historia, un 28 de agosto de 1920 ante Dinamarca. Sí participaría en cambio, en el campeonato de 1912 (Barcelona), donde cayó en semifinales ante la Gimnástica Española. En la temporada 1923-24 en cambio, volvió a ganar el Campeonato Regional y volvió a luchar por el título nacional de 1924. En cuartos de final eliminó al Sevilla Fútbol Club con bastantes dificultades; y en semifinales a su bestia negra, el F. C. Barcelona, en una eliminatoria que se disputó finalmente en tres partidos. 7 En los partidos jugados, se incluye el partido de definición jugado en territorio neutral entre Chile y Perú. Su primer equipo disputa sus partidos como local en el Stadium Gal, con capacidad de 6344 espectadores. En negrita, los estadios más usados por las selecciones en condición de local.
Una pista instalada en lo que posteriormente fue el Cine Novedades y las desaparecidas instalaciones del Velódromo de la Bonanova, fueron los primeros lugares donde se practicó este nuevo deporte denominado Lawn-Tennis. «La verdad que esconde Adidas con el nuevo color rosa del Real Madrid». Para evitar inconvenientes al enfrentarse con equipos con uniformes azules o celestes, el conjunto bananero usa como tercer uniforme un diseño similar al suplente pero de color blanco con pixelado azul, además de pantalones blancos y medias blancas. Desde la década de 1980, se han logrado avances significativos en el diseño de guantes, los cuales ahora cuentan con protectores que previenen que los dedos se tuerzan hacia atrás, segmentaciones para permitir mayor flexibilidad y palmas hechas de materiales diseñados para proteger la mano del jugador y aumentar su agarre. Durante la primera década del siglo XX «racinguistas» y «sportinguistas» establecieron una gran rivalidad entre sí, dividiendo a la población de esta ciudad, que por aquel entonces contaba con 10 000 habitantes. En la temporada 1929-30 el Real Unión logra su mejor clasificación en su historia en Primera División con una 6.ª plaza.
Teatro Cajigal: Es una edificación del XIX, construida en el estilo Neoclásico frente a la Plaza Rolando. La prensa madrileña admitió la superioridad de los fronterizos frente al Real Madrid, pero la final no estuvo exenta de polémicas ya que el primer gol de los iruneses fue un gol fantasma muy protestado por el público. La victoria justificó su presencia en el partido inaugural del estadio de San Mamés, el 21 de agosto de 1913, frente al Athletic Club, con resultado de empate a un gol. La final de la Copa se disputó el 24 de mayo en el Estadio de Atocha de San Sebastián, y enfrentó al Real Unión con el Real Madrid, al que ya había vencido en la final de 1919. La final se decidió por 1-0, gol de Echeveste y supuso el segundo título de Copa de los iruneses. En la copa de 1922, el Real Unión se deshizo del Real Madrid en las semifinales y se plantó en la final frente al Barça, pero los catalanes barrieron al Real Unión por un contundente 5-1 en el campo vigués de Coya.